#ResourceNotFound: ResourceHighlights#
El sensor de oxígeno, también conocido como sonda lambda y sensor de O2, tiene la función de controlar la cantidad de oxígeno que contiene el gas en el tubo de escape del motor y transmitir esta información a la unidad de gestión electrónica del motor. La unidad de gestión, a su vez, utiliza esta información para llevar la relación de mezcla aire/combustible al valor estequiométrico, que es la relación ideal entre la cantidad de aire necesaria para la combustión total de combustible.
Así, el componente es una de las partes más importantes para garantizar el buen funcionamiento del vehículo. Un sensor de oxígeno viejo y defectuoso impide que el motor funcione a pleno rendimiento. Además, provoca un aumento en el consumo de combustible. Delphi, que recientemente lanzó dos nuevos modelos de sensores de oxígeno para el mercado de repuestos, aplicables a varios vehículos de las marcas Hyundai, Chevrolet, Volkswagen, Fiat y Toyota, responde algunas preguntas sobre la pieza.
¿Por qué el sensor de oxígeno también se conoce como sonda lambda?

Lambda (λ) es la relación que se obtiene a partir de la relación aire/combustible real con la que se considera ideal. El valor estequiométrico es la relación ideal entre la cantidad de aire necesaria para la combustión total de combustible, que ocurre cuando el lamido es igual a 1. Este número disminuye cuando la proporción está enriquecida, es decir, hay poco oxígeno, y aumenta cuando se empobrece, o con mucho oxígeno.
¿Cuándo tengo que cambiar el sensor de oxígeno?
El encendido de la luz del sistema de inyección en el tablero, la caída en el rendimiento, las dificultades para arrancar y las fallas del motor son los signos más claros de problemas en el sensor de oxígeno. Uno de los principales factores que provocan el desgaste de este componente es el uso de combustible de mala calidad. Los sensores en mal estado pueden costarle caro al conductor, ya que causan daños en otras piezas, como las bujías y el convertidor catalítico.
El correcto funcionamiento del sensor se traduce en un consumo adecuado de combustible, un mejor rendimiento del vehículo y emisiones contaminantes dentro de los niveles establecidos por la legislación. Es importante revisar periódicamente el componente una vez al año o según las indicaciones del fabricante del automóvil.
¿Influye el sensor de oxígeno en el control de las emisiones contaminantes?

Sí, ya que este componente sirve para medir la concentración de oxígeno resultante de la combustión, avisando al sistema de inyección electrónica de la cantidad ideal de combustible para el motor, provocando un control más preciso del uso del combustible. Esto permite un mejor rendimiento del motor, un menor consumo de combustible y la consiguiente reducción de los contaminantes emitidos.
Los sensores de oxígeno suelen estar montados en el colector de escape o antes del convertidor catalítico. En algunos vehículos, hay más de un sensor de oxígeno, y esta parte adicional se encuentra después del convertidor catalítico, teniendo la función de monitorear la emisión de gases contaminantes.
Con la perspectiva del inicio del programa de inspección técnica de vehículos en Brasil, previsto para los próximos años, se vuelve aún más importante inspeccionar el correcto funcionamiento del sensor de oxígeno.